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martes, 26 de octubre de 2021

Un vecino del Parque Alcosa descubre la Atlántida después de que le digan que "no hay cojones"

El pasado fin de semana dos vecinos del sevillano barrio del Parque Alcosa, mientras tomaban cerveza en el Tremendo, tuvieron una fuerte discusión acerca de la ubicación de la mítica ciudad de la Atlántida. Tanto es así que, entre citas de Platón y Estrabón, uno de ellos le espetó al otro que la Atlántida era una alegoría inventada por el filósofo heleno en alusión a una sociedad perfecta e idealizada respondiendo el otro que "eso me pongo yo a excavar en donde te digo y fijo que encuentro la Altántida" a lo que su compañero de cervezas le respondió "no hay cojones".

Los improvisados arqueólogos alcoseños, horas antes del sorprendente descubrimiento

Ni corto ni perezoso, el desafiado pidió la cuenta y pusieron rumbo a Valencina de la Concepción, municipio próximo a los terrenos señalados por el empecinado alcoseño, en donde compraron dos palas y dos gorras de la Caja Rural en la Ferretería Dorado y cuatro litronas de Cruzcampo muy frías en el Kasidetó. Ya pertrechados con lo necesario y bajo un sol de justicia, se encaminaron al punto exacto donde iban a llevar a cabo la inesperada actuación arqueológica.

Al llegar al punto señalado por el defensor de la existencia de la mítica ciudad, comenzaron ambos a excavar y cuál fue su sorpresa cuando, al poco de acabarse la tercera litrona y empezando ya la cuarta, encontraron los primeros restos de lo que posteriormente se ha confirmado como un gran templo de orígen atlante. Unos pocos metros más de excavación dieron con una gran estatua y con lo que serían los vestigios de los canales que rodeaban la Atlántida y conectaban con el, por entonces, Golfo Tartésico, según describió Platón.

Impresionante para lo que dan cuatro litronas

Fuentes del CSIC y la Universidad de Sevilla han confirmado el magnífico hallazgo tras haber continuado con las excavaciones arqueológicas, después de que a los dos improvisados arqueólogos se les acabara la cerveza. "Si llegamos a comprar más litronas, fijo que descubrimos hasta pirámides" alegó el descubridor en declaraciones a La Cosa Está Muy Mal. "El tesoro del Carambolo es un mojón al lado de lo que hay enterrado aquí" añadió.